lunes, 21 de abril de 2008

Mi filosofía

Esta es mi vida, estas son mis ideas. Es como un gran ensayo de filosofía. La diferencia reside en que en el ensayo de filosofía te obligan a escribir algo aunque no quieras, mientras que aqui escribo porque me gusta y porque quiero.
Este tema va sobre mi filosofía.
Tal vez no lo sepais, pero yo pienso mucho, muchísimo. Sobretodo hacía esto después de clase de filosofía.
Siempre me ha parecido un tema realmente interesante la existencia de un Dios, la religión, qué hay después de la muerte y todas esas cosas.
No es que yo sea alguien que precisamente este muy informado sobre estos temas, sobre que es lo que piensan otros autores u otras culturas, pero si soy alguien que se ha planteado muchas veces estos temas, y les he dado miles de vueltas.
Siempre he creido que yo acabaría formando mi propia religión. Propia porque sería en lo que yo creo, sin importar si los demás lo aceptan, lo creen o lo entienden.
No se si es ahora el momento de contar todas mis teorías filosóficas sobre si existe Dios, ni sobre nada de lo que pienso. Eso es algo que ni si quiera tengo aun claro. Todas esas cosas necesito perfeccionarlas hasta el punto de que ni yo misma pueda dudar de ellas.
Simplemente quería explicar porqué siento que puedo crear mi propia ideología, mi propia religión.
A pesar de ser tan joven, he vivido muchas experiencias, pero no sólo eso. Tengo la capacidad de ponerme en la piel de cualquier persona, por muy distinta que sea a mi y comprender sus motivos, aunque esto no implique aceptarlos. Esto lo utilizo para comprender a los demás. No se puede juzgar si no se conocen realmente los motivos que llevaron al suceso.
Explicaré esto. Imaginad que una persona llega y os pega un puñetazo. Es un caso extremo. ¿Podríais aceptarlo?, ¿seríais capaces de plantearos por qué lo hizo antes de juzgarle y determinar si deberíais dejar de ser su amigo y odiarle como enemigo o simplemente, no os plantearíais porque lo hizo, simplemente le devolveríais el puñetazo o le diriais una burrada?
Evidentemente, cuando a uno le agreden de esta forma la reacción es instantánea, le mandas a la mierda, le devuelves el puñetazo y le preguntas porque lo hizo. Si la otra persona no quiere daros una razón o no es capaz de hacerlo, pues lo normal es molestarse con esa persona.
Yo seguramente, ante el puñetazo reaccionaría igual que todos. Al fin y al cabo es una agresión. Pero la diferencia reside en que yo no sería capaz de juzgar a esa persona sin motivos. Tendría que ponerme en su lugar, entender porque hizo aquello, y posiblemente llegara a comprenderlo, incluso a pensar que tiene toda la razón, podría hasta aceptarlo. Pero para aceptarlo necesito comprender plenamente sus motivos, llegar al caso de ponerme en el lugar de esa persona y estar segura de que en su lugar, yo, o cualquier otra persona mínimamente razonable, habría hecho eso mismo.
A veces no es agradable comprender los motivos de mucha gente, porque no es fácil defender a un culpable, si no preguntenle a un abogado, ellos lo sabrán mejor que yo.
Bueno, creo que he enrevesado mucho lo que quería decir, pero habrá servido si al leerlo sois capaces de comprender mejor mi idea.
No sabría que más contar. Por el momento esto va a ser todo lo que cuente sobre mi filosofía, pero sin duda más adelante regresaré al tema.
Un saludo para todo el que lea esto, en especial para aquellos que puedan sentirse identificados conmigo cuando hablo de ponerse en el lugar de otro.
Besos.

Un día fructífero

Hoy he sentido la llamada del teclado.
Necesitaba escribir, hay mucho que contar, pero no vale todo de golpe, hay que tener tacto, hay que saber expresarlo.
No puedo pararme, pero tampoco escribir sin ton ni són.
Parecera extraño pero si lo piensas no lo es. ¿Por qué habria de gustarme escribir en el teclado?
Tiene su sentido. Todo lo tiene.
Yo aprendí a tocar el piano, a penas di clase un año, pero me enseñaron lo básico para sentir que ni queria dedicar mi vida a ello, ni quería seguir dando clase, pero tampoco olvidarlo por completo.
Sin embargo, no tengo un piano, tengo un teclado eléctrico, pero no me cabe en ningún lado, asi que vive encerrado en su caja durante muchísimo tiempo. A veces lo saco a paseo, le doy un par de vueltas, intento dar música a aquellas letras que compongo, que esperan ansiosas ser tocadas. Pero esto no viene a juego con este instante.
El piano requiere gran movimiento de dedos, y un dia escribiendo en el messenger descubrí el parecido que tanto me entusiasma.
Teclear en el teclado es como tocar en el piano.
Y, ¿qué más puede necesitar un pianista frustrado?
Sin más, cuando algo me falta, recurro al teclado. Mucho más cómodo que sacar el piano. Menos escandaloso, y más productivo. En un piano improvisas, y si no apuntas o grabas lo que tocas todo se pierde. En un teclado tu escribes, pero no escribes en la "nada". Escribes en una página, en una conversación, en un comentario, en un documento... Todo vale, sólo importa escribir. Y tienes la seguridad de que lo que escribas no lo vas a perder. Además de que puedes compartir con otros lo que escribes, puedes publicarlo, puedes imprimirlo y llevártelo a cualquier parte, puedes borrarlo, corregirlo, copiarlo y repetirlo tantas veces como te guste.
Es lo que le falla a un piano... al menos al mio.
Si pudiera hacer todo esto con mi piano, tal vez sería una gran compositora. Pero como no puedo, no lo soy. Y tampoco me esfuerzo en ello.
Hoy como ayer, no podré dormir, piensa que te piensa, pensando en montones de cosas, que me preocupan, me alegran o tan solo me confunden.
Por ello sigo aquí, sigo escribiendo. Evito el momento de tumbarme en la cama y empezar a recordar.
A veces recordar puede ser una tortura. Sobretodo estando tumbado en la cama o similares. Es como volver a vivir un momento durante todo el rato que estas recordándolo. Puede ser un momento bueno, uno malo, uno que te llamó la atención, consciente o inconscientemente, pero al fin y al cabo fue un momento.
Si fue bueno intentas repetir la sensación, volver a sentir que fue bueno, llegando a ser tan intenso que cuando te recobras del pensamiento no sabes si estas en la realidad o en aquel momento.
Si fue malo intentas corregirlo, lo repites y lo repites hasta que llegas a la conclusión de que deberias haber cambiado una acción propia, pero finalmente regresas a la realidad más triste que al principio, porque sabes que eso ya ha pasado y no tiene solución.
Luego están los otros dos casos curiosos, que te haya llamado la atención un momento consciente o inconscientemente.
Cuanto más inconsciente fuese aquel momento que recuerdas más posibilidades hay de que sueñes con ello.

Pero alguien que piensa demasiado, que recuerda en exceso, al final lo único que consigue es sufrir. Aunque lo que este recordando sean cosas buenas y bonitas, sólo se conseguirá sufrir porque todas esas cosas están ya finalizadas y no volverán a producirse. Los hechos no vuelven a producirse, puede que sucedan de forma similar, pero nunca son exactamente iguales. Por eso, sólo se sufre.
Hay que vivir más y recordar menos. Mejor cambiemos esta frase. Habría que vivir mas y recordar menos.
Pero tenemos un sistema nervioso central que no nos permitirá escaparnos de esta vida tan fácilmente.
Una pena..
Pero dejémonos de tantas lamentaciones. Al fin y al cabo, así lo único que hacemos es recordar y acabamos sin avanzar nada.
Para terminar con esta entrada, no me queda si no volver al principio. Necesitaba escribir, y finalmente lo he hecho. Tal vez más largo y extendido de lo que esperaba, pero no hay que poner límite a las palabras cuando afloran, siempre que éstas lo hagan con sensatez y concordancia.
Asi que, por todos los que lo lean, y por mi, acabo ya esta entrada.
~~♪♫♪~~ ☼

¿Por qué?

Eso es lo que hay que preguntarse, siempre. ¿Por qué?
Difícil pregunta.. y aun más la respuesta.
Simplemente me aburria.
Parece una respuesta simple, pero dice mucho.
El que se aburre es porque tiene mucho tiempo libre. El que se aburre no tiene a alguien que le de coba, le falta algo.
Pero ser una persona aburrida no es lo mismo que vivir aburrido.
Puede que el aburrimiento te dure un instante, un rato, unas horas, un dia o toda la vida.
Yo hoy me aburro.
No he quedado con mis amigos, hace un dia que no los veo, pero basta para aburrirse.
También es verdad que si no eres una persona activa no puedes aburrirte porque vives en el aburrimiento. Si siempre haces algo y depronto dejas de hacerlo para hacer una cosa que te produce menor satisfacción, entonces te aburres.
Yo veo a mis amigos casi, casi todos los dias. Doy clase con ellos asi que como poco 4 dias a la semana les veo, mas luego cuando quedamos y cosas asi. Además despues de clase solemos ir a dar una vuelta, sobretodo los dias que tenemos clase por la tarde, pero no quita que los viernes y miércoles no lo hagamos.
Quitando esto, quedan los fines de semana de 3 días.
Los sábados ahora los paso más durmiendo que otra cosa, xq los viernes salimos hasta "altas horas", es decir, regresamos a casa la mañana siguiente.
Por todo esto, hoy que no les he visto desde que les deje la mañana del sábado o antes, me aburro. Hoy que nadie me habla por msn y tampoco encuentro a quién saludar, me aburro. Hoy que estoy a la mitad de nivel para ser del nivel máximo en el Ragnarok, me aburro. Hoy que se me borraron un post entero del fotolog y una partida completada del Zoo Tycoon, me aburro.
Si, hay muchas más cosas, pero con estas demuestro lo que quiero: Me Aburro.
Pero me aburro con sinceridad, me aburro de forma extrema y razonada.
Este es el por qué de este blog.
Puede que no parezca suficiente. Puede que deje algo a medias. Puede que lo entiendas y puede que no. Pero, ¿qué más da? ¿A caso hace falta una excusa más convincente? ¿Si quiera hace falta una excusa para escribir un blog?
No, no lo hace. No hace falta nada, ninguna excusa, ningún motivo, y aun asi lo doy. En el fondo todos lo damos. Todos necesitamos una razón para hacer algo. Todos necesitamos entender nuestros propios motivos y a veces hasta necesitamos exponerlos, contarlos a todos.
Y sin más dilación, doy por terminada esta entrada, primera pero última por el momento, momento que durará hasta el instante en que vuelva a sentir el impulso de escribir. La necesidad de comprender que el aburrimiento puede ser aplacado con una acción estúpida, con cualquier cosa que permita ocupar un tiempo que nada más puede ocupar.
Porque, ¿de donde viene el aburrimiento? De la ausencia de acción, del recuerdo de esta, del olvido que tiene todo sobre ti.

Por mi. Por todos. Por aquel que le interese. Y sobre todo, sobre todo, porque me aburro.